Diariamente los desarrolladores de software somos enfrentados a cambios drásticos dentro de nuestro ambiente laboral, lo cual es bueno, pero también tiene su contraparte. ¿Qué tan moldeables somos a los cambios? ¿Cómo nos adaptamos a ellos? Rodeados de paradigmas mentales internos y externos, aprendemos a convivir con ellos e incluso a adaptarlos a nuestro diario vivir, pero ¿Cómo reconocerlos y vencerlos?
“… Si aspiramos a un cambio significativo, equilibrado, tenemos que trabajar sobre nuestros paradigmas básicos.” – Stephen Covey –
Empecemos definiendo qué es un paradigma mental. Los paradigmas mentales son todo este grupo de conocimientos que forman patrones o modelos de conducta específicos en cada individuo y generan en este una fuerte e inamovible “comfort zone”, donde no hay espacio para la innovación, riesgo o cambio según la necesidad del ambiente. En resumen, para no ponernos muy técnicos se podría decir que estos, son patrones de conducta conformistas y mediocres (opinión personal).
Como ejemplo, tomemos un caso común de un paradigma mental.
“Siempre lo hemos hecho de esta manera, porque cambiar hoy” o tal vez “si no esta roto no trates de arreglarlo”
Ahora bien, teniendo claro qué son estos dichosos paradigmas (estoy segura de que ninguno de nosotros quisiéramos incurrir en uno e inconscientemente lo hemos hecho) vamos al grano y formulemos dos preguntas principales: ¿Cómo un desarrollador de software puede generar o adoptar un paradigma mental?, ¿cuáles son los paradigmas mentales típicos de los desarrolladores?
Sabemos bien que estando en la industria tecnológica del cambio, constantemente nos vemos sometidos a toma de decisiones, cambios de arquitecturas, lenguajes, y todo aquello que el desarrollo de software conlleva. Por ende, se podría pensar que como desarrolladores estamos 100% preparados para el cambio, y lastimosamente no es así.
Basándonos en la experticia de ingeniero, sabemos qué herramienta es la adecuada para la solución de cada necesidad expresada por el cliente, y de eso se trata, de saber exactamente o con mucha precisión qué necesitamos para abordarla.
La cuestión empieza a desbordarse cuando basados en dicha experticia empezamos a generar estos paradigmas mentales que no nos permiten salir a explorar otras zonas para ampliar nuestro (vulgarmente llamado) “repertorio”, sino que nos dejan dando vueltas en nuestro sitio seguro hasta que hacemos las cosas mal, o nos cerramos las puertas del aprendizaje.
A continuación veremos algunos de estos paradigmas mentales ingenieriles:
- Los desarrolladores de software no maquetamos HTML ni hacemos CSS, eso es tarea de diseño
- Lo mío es el backend, no considero que sea bueno/a en frontend
- Los desarrolladores de software no sabemos, ni nos gusta hacer pruebas unitarias, funcionales, o de integración, etc.
- Yo no aprendo este lenguaje porque no es muy usado en la industria
- Yo no cambio Java por .Net / Yo no cambio .Net por Java
- He usado esta herramienta por mucho tiempo como para cambiarla por una nueva
- Las pruebas unitarias no son necesarias
- No está bien hecho, pero funciona, y eso es lo que le interesa al cliente, es mejor hacer algo rápido que funcione que algo con buena arquitectura que tome más tiempo
- Si no lo hago yo, no está bien hecho
(Haz un ejercicio y piensa si has enfrentado alguno de estos paradigmas en tu equipo de trabajo, con personas de la empresa o incluso tú mismo)
Ahora bien, la mayoría de los paradigmas tienen un objetivo de adaptación y nos ayudan en muchos aspectos de nuestro trabajo, pero la realidad puede ser diferente a como la vemos. Debemos tener la flexibilidad adecuada para cambiar un paradigma cuando este deja de funcionar o afecta directamente nuestro desempeño laboral y nuestra visión de aprendizaje.
Ejemplo:
Te asignan a un proyecto nuevo con tecnologías que no conoces, programación funcional, alguna herramienta o proceso que consideres inservible. Piensa primero si estás recurriendo a uno de estos paradigmas y cuestiona, ¿en verdad tengo el criterio para hacer este juicio? Si lo tienes no hay nada que discutir, si por el contrario solo es un paradigma mental, ten presente:
Bajo mi percepción la manera más adecuada de destruir paradigmas mentales es mantener la mente completamente abierta y receptiva al cambio para escuchar las evidencias y pruebas, documentos, experiencias de proyectos, teams o gp’s de la empresa y luego decidir si es correcto o no
Los desarrolladores de software con paradigmas muy ceñidos, suelen ser muy inflexibles y poco tolerantes, así que trata de aprender a desaprender, aceptar las recomendaciones y comentarios de tus compañeros o expertos
Otra forma de destruir malos paradigmas mentales es leer, instruirse, y preguntar
Pero ojo, si eres consciente de estas cosas y no ha funcionado, aquí te dejo una pequeña clave:
La motivación juega un papel muy importante, primero identifica el problema y el paradigma. Luego, crea una motivación que te incite a tener esta nueva oportunidad de aprendizaje o desarrollo laboral y el paradigma se verá derrumbado. Por ejemplo, si debes aprender una tecnología que según tu percepción no será muy útil, piensa en que es una oportunidad de ampliar tu biblioteca de lenguajes y conocimientos, y que esto te ayudará a tener más bases en tu experiencia laboral. Si logras ver estos paradigmas más como una ventaja, podrás acabar con ellos fácilmente.
Conclusiones
Como estas, hay muchas maneras de derribar estos paradigmas mentales que nos atan a la tan temida zona de confort que muchas veces no vemos por estar tan acostumbrados a auto aconsejarnos.
Debemos ser conscientes de que todos los seres humanos tenemos alguno que otro paradigma, ya sea en el ámbito laboral o en el ámbito social y que estos en algún momento de nuestra vida actúan como piedras que nos impiden conseguir resultados.
Estar diariamente en constante actividad laboral, toma de decisiones para el proyecto, aprendizaje de tecnologías, y solución de problemas nos hace vencer estos paradigmas de manera más sencilla e incluso no incurrir en ellos, pero ¡ten cuidado! Anímate a descubrir si has sido víctima de ellos, y cada vez que reconozcas uno, recuerda que el ingeniero sabio, es aquel que tiene la capacidad de tomar la mejor decisión entre varias opciones, no en elegir la más cómoda.
Referencias
http://blogforbusinessonline.com/vidaytiempolibre/que-son-los-paradigmas-y-como-romperlos/
http://prevencionar.com.co/2015/09/24/siete-paradigmas-mentales-que-hacen-improductiva-una-reunion/
http://blog.masterconsul.com/tag/vencer-los-paradigmas/
http://comohacerpara.com/destruir-paradigmas-mentales_4808e.html
